Pero tras la experiencia de la excursión de final de curso, comenzaron a aparecer nuevos temores, pensamientos e ideas ilógicos así como complejas paranoias. Mi mente, obsesionada con la Religión y con los acontecimientos trágicos de que tenía conciencia, empezó a establecer una relación directa entre mis actuaciones y una consecuencia negativa derivada de éstas: hacer una cosa en concreto u otra, desencadenaba una determinada y precisa tragedia.
Confusas asociaciones entre acciones y efectos, empezaron a angustiarme e incrédula, luchaba sin éxito, por entender una situación que difería mucho de la realidad que me rodeaba.
Actividades tan cotidianas como elegir la ropa para vestirme cada día, hacer los deberes, encender la televisión y fijar una programación; arreglar la habitación o prepararme la mochila del colegio, por ejemplo, suponían dificultosos retos para mí pues imaginaba un resultado perjudicial deviniendo de la realización de los mismos.
A caballo entre un universo fantástico y la realidad establecida, y cercada por una enfermedad que restringía no sólo mis voluntades sino también algunas de las actividades humanas más básicas, fueron sucediéndose los años.
Ya no gesticulaba una sonrisa, había perdido la capacidad física para hacerlo y sólo lloraba, lloraba desconsolada por las terribles ideas y peores pensamientos que invadían mi mente enferma.
El Trastorno Obsesivo Compulsivo se había apoderado de mí y dejé de ser dueña de mi propia conciencia.
Ideas, pensamientos y, lo que yo creía que eran sentimientos, negativos, ( contrarios a los míos verdaderos), comenzaron a dominar mi mente.
No me pertenecían y eran consecuencia de la enfermedad psicológica que padecía. Sin embargo, yo no podía saberlo y creí haberme convertido, de la noche al día, en una mala persona...
Ya no sólo imaginaba efectos fatídicos sobreviniendo de la consecución de determinados actos, sino también, terribles insultos contra los seres que más quería, ( familia, amigos, incluso Dios y otras figuras religiosas), así como, lo que yo consideraba que eran entonces, sentimientos de alegría derivados de todas aquellas desgracias que sucedían a mi alrededor o escuchaba en las noticias.
“- ¿Pero qué me estaba pasando?-” No comprendía nada. Aterrada por unos sentimientos de culpabilidad increíblemente espantosos, caí en una profunda depresión de más de tres años.
Fui tratada por diferentes especialistas en psicología y psiquiatría de toda España sin embargo, parecía que no existía una cura definitiva y eficaz para mi afección.
Físicamente, me encontraba en un estado de debilidad extremo debido a la pérdida de peso ocasionada por la depresión y la ansiedad que sufría, ( apenas contaba con 37 kilos y medía un metro y cincuenta y cinco centímetros), y a los numerosos efectos secundarios de la abusiva medicación que tomaba.
Recuerdo aquellos tres años de tratamiento, como los peores de toda mi vida.
Pasaba literalmente, los días llorando acosada por aquellos espeluznantes, involuntarios y persistentes pensamientos e ideas que me atormentaban, apenas dormía amenazada por terribles pesadillas que me consumían y, desesperada, sentía que no reunía fuerzas suficientes como para continuar luchando contra la indescriptible tortura, principalmente psicológica, que suponía permanecer viva.
“- Es una enfermedad-”, me decían, “- tú no tienes la culpa de padecerla, ni mandas sobre tus pensamientos, son agentes intrusivos que pretenden hacerte daño en contra de tus verdaderos sentimientos-”.“-¡ Dios mío! ¿Qué quería decir todo aquello?-”
Continua aquí...
Confusas asociaciones entre acciones y efectos, empezaron a angustiarme e incrédula, luchaba sin éxito, por entender una situación que difería mucho de la realidad que me rodeaba.
Actividades tan cotidianas como elegir la ropa para vestirme cada día, hacer los deberes, encender la televisión y fijar una programación; arreglar la habitación o prepararme la mochila del colegio, por ejemplo, suponían dificultosos retos para mí pues imaginaba un resultado perjudicial deviniendo de la realización de los mismos.
A caballo entre un universo fantástico y la realidad establecida, y cercada por una enfermedad que restringía no sólo mis voluntades sino también algunas de las actividades humanas más básicas, fueron sucediéndose los años.
Ya no gesticulaba una sonrisa, había perdido la capacidad física para hacerlo y sólo lloraba, lloraba desconsolada por las terribles ideas y peores pensamientos que invadían mi mente enferma.
El Trastorno Obsesivo Compulsivo se había apoderado de mí y dejé de ser dueña de mi propia conciencia.
Ideas, pensamientos y, lo que yo creía que eran sentimientos, negativos, ( contrarios a los míos verdaderos), comenzaron a dominar mi mente.
No me pertenecían y eran consecuencia de la enfermedad psicológica que padecía. Sin embargo, yo no podía saberlo y creí haberme convertido, de la noche al día, en una mala persona...
Ya no sólo imaginaba efectos fatídicos sobreviniendo de la consecución de determinados actos, sino también, terribles insultos contra los seres que más quería, ( familia, amigos, incluso Dios y otras figuras religiosas), así como, lo que yo consideraba que eran entonces, sentimientos de alegría derivados de todas aquellas desgracias que sucedían a mi alrededor o escuchaba en las noticias.
“- ¿Pero qué me estaba pasando?-” No comprendía nada. Aterrada por unos sentimientos de culpabilidad increíblemente espantosos, caí en una profunda depresión de más de tres años.
Fui tratada por diferentes especialistas en psicología y psiquiatría de toda España sin embargo, parecía que no existía una cura definitiva y eficaz para mi afección.
Físicamente, me encontraba en un estado de debilidad extremo debido a la pérdida de peso ocasionada por la depresión y la ansiedad que sufría, ( apenas contaba con 37 kilos y medía un metro y cincuenta y cinco centímetros), y a los numerosos efectos secundarios de la abusiva medicación que tomaba.
Recuerdo aquellos tres años de tratamiento, como los peores de toda mi vida.
Pasaba literalmente, los días llorando acosada por aquellos espeluznantes, involuntarios y persistentes pensamientos e ideas que me atormentaban, apenas dormía amenazada por terribles pesadillas que me consumían y, desesperada, sentía que no reunía fuerzas suficientes como para continuar luchando contra la indescriptible tortura, principalmente psicológica, que suponía permanecer viva.
“- Es una enfermedad-”, me decían, “- tú no tienes la culpa de padecerla, ni mandas sobre tus pensamientos, son agentes intrusivos que pretenden hacerte daño en contra de tus verdaderos sentimientos-”.“-¡ Dios mío! ¿Qué quería decir todo aquello?-”
Continua aquí...
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17 comentarios:
Es terrible.
Y es increíble tu fuerza para contarlo.
GRACIAS EN MAYÚSCULAS, PRECIOSA, POR CONSIDERARLO DE ESTE MODO.
(En realidad, es una experiencia por la que no eliges pasar y que, una vez comienza, sólo te queda batallarla así que las fuerzas, emergen aún cuando no imaginas que puedan llegar, si quiera, a existir)
¡UN BESAZO INMENSÍSIMO CON TODO MI CARIÑO!!!;"-*****
Reyes Corbató
Pasé por tu Blog y la verdad es que me gustaría poder estar en contacto contigo vía e-mail, (si no tuvieras inconveniente). Mi dirección es: taira_135@hotmail.com
GRACIAS,
Reyes Corbató
Mi hermano tiene este trastorno y estamos desesperados no sabemos como ayudarlo pues se niega a acudir a un medico y a tomar pastillas ya no sabemos que hacer.
¡Hola, Daniela!;"-***
La familia debéis insistir en que reciba el tratamiento farmacológico que precisa en combinación con la terapia psicológica, (la de elección por su contrastada eficacia es la Terapia Cognitivo-Conductual).
Aunque se niegue, debéis ser la familia quién le ayude porque parece que, por sí mismo, se va a abandonar y ahí, sí existiría el peligro de que empeorara.
¡MUCHÍSIMO ÁNIMO, DANIELA, Y PARA TODO LO QUE NECESITES, POR FAVOR, CUENTA CONMIGO!!!
Con el MAYOR DE MIS CARIÑOS, PRECIOSA ;"-*****
Reyes Corbató
hola reyes!soy una sufridora de toc...quisiera si es posible hacerte ciertas preguntas para orientarme,tienes algún mail?no me atrevo a contar todopublicamente...si quieres contestarme mandandome tu mail seria maravilloso,y yo t mando el mio,un beso fuerte y enhorabuena por tu gran logro!
¡Hola, Unknown! ;"-*****
Mira, aquí te dejo esta dirección de correo donde puedes contactar conmigo: reyescmcm@gmail.com
Intentaré poner todo de mi parte para ayudarte.
¡MUCHÍSIMO ÁNIMO Y RECIBE, POR FAVOR, UN ABRAZO Y UN BESO FORTÍSIMOS CON TODO MI CARIÑO!!!;"-*******
Reyes Corbató
Hola Reyes.
Gracias por haber creado este blog, ya que somos muchos los que padecemos esta afección. Mi situación es igual a la que viviste para mi el rezar y lavarme para evitar que algun ser querido le pase una tragedia es pan de cada día lo que ya no se como llevarlo, porque hasta mis acciones en el trabajo se ven limitadas por uno que otro pensamiento :(... como pudiste salir de todo?... a veces siento que esto no acaba nunca.. saludos desde chile.
paulina
Paulina, POR FAVOR, ¿podrías contactar conmigo vía e-mail? Mi dirección es: reyescmcm@gmail.com (ME ENCANTARÍA PODER AYUDARTE E INTENTARÍA PONER TODO DE MI PARTE).
Debes recibir en primer lugar, terapia psicológica cognitivo-conductual, (y en caso necesario, combinarla con medicación pero que se podría retirar progresivamente coincidiendo con tu mejoría).
¡UN INMENSO ABRAZO CON TODO MI CARIÑO, PAULINA, PRECIOSA!!! ;"-******** Reyes Corbató
Hola, se supone que sufro toc sin compulsiones desde hace unos años y me gustaría hacerte a tí y a los que queráis contestar. Gracias de antemano:
-¿ cómo os afecta en situaciones de mayor estrés como por ejemplo un examen? Os aumentan esos pensamientos?
- en esas situaciones de estrés tenéis la sensación que lo que os agobia no es esa situación o suceso si no son esos pensamientos?
- os aumentan los despistes, olvidos, incluso os falla la memoria a corto plazo?
- tenèis la sensación de ser egocéntrico o egoísta, estáis tanto en vuestra mente que se olvida que algún ser querido tiene un problema o está malo, incluso os invade la sensación de que no os importa
-cuando estáis en crisis, os invaden los pensamientos estáis más susceptibles a los comentarios de los demás ?
- como son vuestras reacciones o recursos en estas crisis o situaciones? Os bloqueáis? Se anula la capacidad de pensar, reflexionar, ser razonables?
- a alguno le ocurre que ciertas situaciones que deberían producir ilusión le produce temor, como independizarse, o ligar, o tener pareja....ya no te cuento hijos...
Creo que eras tu reyes no¿ la que comentabas que incluso dudabas que tenías toc, a mi me pasa lo mismo. Es cierto que cuando menos vuelta le des a los pensamiento y los aceptes menos latas dan, pero a veces tengo tal bloqueo, que incluso no se sí hay pensamiento negativos, simplemente me anulo y no hay un motivo real.
Por cierto me he dado cuenta que no me he presentado o hecho una pequeña introducción, tengo 30 años, vivo con mis padres, aunque he estudiado fuera y vivido en otro país, nunca he tenido pareja, tengo una formación alta y fue al terminar mis estudios cuando empecé con esta historia, con tag, y hasta unos años después no me diagnosticaron toc. Voy a psicólogo y psiquiatra, me va muy bien con ellos. Su opinión es que soy de personalidad obsesiva y en el paso de estudios a trabajo, como se ha alargado con esto de la crisis en España, se ha convertido en toc, pero como yo tiendo a generalizar, mis pensamientos van tb a los personales. Tengo que añadir, que siempre he sido una persona insegura e indecisa, pero sociable.
Dejo de escribir, que un poco más y te dejo el Quijote. Gracias por este blog.
Saludos a todos
ENCANTADA, Laia,
En mi caso concreto, puedo responder a tus preguntas desde la recuperación de mi cuadro de Toc.
Las situaciones de estrés, siempre incrementan el pensamiento obsesivo, (o idea intrusiva), porque la ansiedad, aumenta. Por eso es MUY IMPORTANTE evitarlas, (en la medida de lo posible).
Cuando me encontraba afectada, mi concentración y mi memoria se vieron gravemente afectadas, (pues las obsesiones ocupaban mi mente casi por completo...)
Por este mismo motivo, es natural, (casi inevitable), centrarse en uno mismo descuidando, sin querer, a los demás y a nuestro entorno en general. (Pudiéndonos sentir egoístas por ello).
Encontrarnos bloqueados pero también, susceptibles en los momentos de crisis, es también, algo natural, Laia. Ten en cuenta que experimentamos niveles de ansiedad máximos y las emociones, están a "flor de piel" aún en pleno bloqueo mental producido por tanta información negativa que nos asusta y nos paraliza. (Aunque no haya presencia de pensamiento obsesivo, es tanto lo que llevamos a nuestras espaldas, que nos quedamos sin reacción...parados, bloqueados).
A mí, todo esto me sucedía, Laia, cariño. Y es común en las personas que sufren Toc.
Asustarnos frente a ideas positivas e ilusionantes, ocurre frecuentemente en la personalidad obsesiva porque le damos mil vueltas a las cosas, (y aunque de entrada, sean positivas, les buscamos su lado temeroso de una forma yo diría que casi inconsciente).
Es como si existiera una hiperconciencia de la realidad, (buscamos los dos lados de la misma moneda aunque pueda ser errónea nuestra percepción pero nos adelantamos a pensar).
Y llegar a dudar acerca de si es Toc lo que sufrimos, me temo que es una constante en las personas afectadas por este trastorno de ansiedad. Es una consecuencia más del Toc: dudamos de todo y por supuesto, de sufrir la afección, también.
Me comentas, Laia, que recibes tratamiento farmacológico y psicológico, ¿verdad? ¿Recibes la terapia cognitivo-conductual??? Es que es la de elección por su contrastada eficacia.
Mira, te dejo mi dirección de e-mail por si quieres contactar conmigo. ¡A MÍ, ME ENCANTARÍA, LAIA!!! ;"-********* Es: reyescmcm@gmail.com
¡MUCHÍSIMA FUERZA Y UN BESITO ENORME CON TODO MI CARIÑO!!!! ;"-DDDDDD
Reyes Corbató
Hola yo me llamo Macarena y padezco TOC para mí es muy difícil contar todo esto porque sinceramente creo que mi enfermedad no la poseeee nadie, hago tales tonterías que me hacen pensar que estoy medio loca, cosas de repetición,observación. El simple echo de generme que lencamtar del sofá me hace hacer múltiples tonterías incluso el echo de escribir este comentario,esperó que alguien me comprenda y que no me llame loc al algo por el estilo porque aunque parezca mentora soy una persona muy norma
Hola respondo aquí porque no se publicar.YO SUPERÉ AL TOC. Soy un chaval de 19 años y cuando tenía 17 me entro la primera obsesión Que era no empalmarme, esto lo derivé hacia creer si era gay o no y tuve los peores síntomas (no los describo xk se que puede obsesionaros mas de la cuenta). La cosa es que fui a terapia psicológica y con el tiempo me ayudó a tratarlo y lo superé. Después de ello, me vinieron obsesiones con la limpieza, etc y al saber como actuar las superé. Cual es la realidad? QUE UNA VEZ QUE APRENDES A SUPERAR LA PRIMERA, LAS DEMAS SON PAN COMIDO! MUCHA SUERTE CON LO VUESTRO Y QUE LE DEN POR CULO AL TOC JOJOJOJO
Macarena, preciosa,
POR FAVOR, ¿podrías contactar conmigo a mi dirección de e-mail? De esta forma, creo que podría ofrecerte una mejor ayuda, (más personalizada y con un seguimiento).
Por aquí, me temo que sólo puedo redactar unas pocas líneas y hay veces en las que noto que la persona necesita comprender muchas cosas sobre esta afección antes de poder recibir los consejos sobre el tratamiento a seguir.
Mira, mi dirección es la siguiente: reyescmcm@gmail.com
POR FAVOR, no tengas miedo, (porque, junto con la ansiedad, es el peor enemigo para quienes sufren toc). Puedes superar tu situación actual recibiendo terapia psicológica cognitivo-conductual de calidad, (de forma intensiva y continuada), y tal vez, también combinándola con medicación, (esto lo valoraría, siempre, un psiquiatra).
POR FAVOR, ¿SI PUDIERAS ESCRIBIRME? MUCHÍSIMAS GRACIAS Y, POR FAVOR, RECIBE TODO MI ÁNIMO Y MI FUERZA CON EL MAYOR DE MIS AFECTOS ;"-)))
Reyes Corbató
MUCHÍSIMAS GRACIAS por tu aportación, Juan Antonio, jejejej
ME ALEGRA INMENSAMENTE saber que te encuentras tan recuperado y con esa energía positiva y determinación ;"-DDDDD
Por supuesto, para lo que puedas necesitar, ¡ya sabes! ;"-p
¡UN FORTÍSIMO ABRAZO Y DISFRUTA AL MÁXIMO!!!! ;"-*******************************
Reyes Corbató
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